lunes, 31 de mayo de 2010

Los amores pasados...

El retorno de los novelistas o de sus héroes a sus amores difuntos, tan emocionante para el lector, es por desgracia muy artificial. Este contraste entre la inmensidad de nuestro amor pasado y lo absoluto de nuestra indiferencia presente, de la que mil detalles materiales -un nombre traído por una conversación, una carta encontrada en un cajón, el encuentro mismo con la persona o, todavía más, su posesión a destiempo, por así decir,- nos hacen tomar conciencia, este contraste tan doloroso, tan lleno de lágrimas contenidas, en una obra de arte, lo contrarrestamos fríamente en la vida, precisamente porque nuestro estado presente es la indiferencia y el olvido, porque nuestra amada y nuestro amor ya sólo nos gustan a lo sumo estéticamente, y porque, con el amor, han desaparecido la turbación y la facultad de sufrir. La melancolía punzante de este contraste sólo es, por lo tanto, una verdad moral.

Cuando empezamos a amar, advertimos por nuestra experiencia y nuestra perspicacia, -a pesar de la protesta de nuestro corazón que tiene la sensación, o mejor, la ilusión de la eternidad de su amor, -sabemos que un día la mujer de cuyo pensamiento vivimos nos será tan indiferente como ahora nos lo son todas las demás menos ella...Oiremos su nombre sin ninguna voluptuosidad dolorosa, veremos su escritura sin temblar, no cambiaremos nuestro trayecto habitual para verla en la calle, volveremos a encontrarnos con ella sin turbación, la poseeremos sin delirio. Entonces, esta presencia segura, a pesar del presentimiento absurdo y tan fuerte de que la amaremos siempre, nos hará llorar; y el amor, el amor que todavía se alzará sobre nosostros como un divino amanecer infinitamente misterioso y triste, pondrá ante nuestro dolor un poco de sus grandes horizontes extraños, tan profundos, un poco de su desolación hechicera...
(Los placeres y los días, Marcel Proust)

viernes, 28 de mayo de 2010

La medida de mi tiempo...

Este texto lo puse hace mucho tiempo, es una belleza, y como tal no me resistir a repetirlo, a repetirme. A fin de cuentas, ¿quién se puede resistir a lo bello? Afortunada yo, que además puedo compartirlo. Disfrutad de la belleza, es terapéutica.
Es el amor.
Tendré que ocultarme o que huir.
Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz. La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única. De que me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras, la vaga erudición, el aprendizaje de las palabras que uso, el áspero Norte para cantar sus mares y sus espadas, la serena amistad, las galerías de la Biblioteca, las cosas comunes, los hábitos, el joven amor de mi madre, la sombra militar de mis muertos, la noche intemporal, el sabor del sueño?
Estar contigo o no estar contigo es la medida de mi tiempo. Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente, ya el hombre se levanta a la voz del ave, ya se han oscurecido los que miran por las ventanas,pero la sombra no ha traído la paz. Es, ya lo se, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la espera y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo. Es el amor con sus mitologías, con sus pequeñas magias inútiles. Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar. Ya los ejércitos me cercan, las hordas.(Esta habitación es irreal; ella no la ha visto.)
El nombre de una mujer me delata.
Me duele una mujer en todo el cuerpo.
(El amenazado, Borges)

jueves, 27 de mayo de 2010

Cómo hacer un poema dadaísta..

Hay épocas en las que necesitamos magia, magia que da la mano a literatura, a veces para cambiar el rumbo de nuestras vidas, otras veces para sacarnos una sonrisa en un día sin poesía, y lo mejor de todo, es que hacerla es tan fácil como seguir estas instrucciones:


Coja un periódico.
Coja unas tijeras.
Escoja en el periódico un artículo de la longitud que cuenta darle a su poema.
Recorte el artículo.
Recorte en seguida con cuidado cada una de las palabras que forman el artículo y métalas en una bolsa.
Agítela suavemente.
Ahora saque cada recorte uno tras otro.
Copie concienzudamente en el orden en que hayan salido de la bolsa.
El poema se parecerá a usted.
Y es usted un escritor infinitamente original y de una sensibilidad hechizante, aunque incomprendida del vulgo.
(Tristán Tzara)

Bueno magos, ya me diréis cuales han sido los resultados.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Atardecer de las palabras..

Os dejo con un poema de Paul Celan,
un poeta que con muy poco expresaba mucho.
Que disfrutéis del poeta del silencio.
Estar a la sombra
de la llaga en el aire.
No-estar-por-nadie-ni-por-nada.
Incógnito,
solamente
por ti.
Con todo lo que cabe dentro,
sin lenguaje
también.

martes, 25 de mayo de 2010

Miedo a ser desgraciado..

De todos los modos de producirse el amor, de todos los agentes de diseminación de ese mal sagrado, uno de los más eficaces es ese torbellino de agitación que a veces nos arrastra. Entonces la suerte está echada y el ser cuya compañía no es grata en ese momento, se convertirá en el ser amado. Ni siquiera es necesario que hasta entonces nos haya gustado más o igual que otros. Se necesitaba sólo que nuestra inclinación hacia él se transformara en exclusiva. Y esta condición se cumple cuando al echarle de menos, hemos sustituido en nosotros la búsqueda del deseo que nos proporcionaba su trato por la necesidad absurda que es imposible satisfacer por las leyes de este mundo y difícil de curar: la necesidad insensata y dolorosa de poseer a esa persona.
(Un amor de Swann, Marcel Proust)

domingo, 23 de mayo de 2010

La alquimia del dolor

La noche de ayer me ha dejado un estado de ánimo increíble,
y un dolor de pies no menos increíble, de hecho
Marta, en uno de sus momentos brillantes, dijo:
El tacón es la única tortura que acepto.
Sin duda un infierno que nos seduce
a todas, o a casi todas.

jueves, 20 de mayo de 2010

Deseo de ser...

Ayer mi amiga Marta y yo teníamos un asunto transcendente entre manos: comprar galletas de gengibre. Al final también compramos de limón, una maravilla, que buenas estaban. Con galletas y un vinito nos pusimos a analizar los sueños de Marta. Sueños de una mujer de letras, como dijo Susi. Poéticos y surrealistas, su inconsciente liberado me tiene dándole vueltas a la cabeza sin tregua. Con ellos haremos literatura. Hoy os dejo con algo realmente bello..con ansia de libertad, para ser un alma libre.
Si uno pudiera ser un piel roja siempre alerta,
cabalgando sobre un caballo veloz,
a través del viento,
constantemente sacudido sobre la tierra estremecida,
hasta arrojar las espuelas
porque no hacen falta espuelas,
hasta arrojar las riendas porque no hacen falta riendas,
y apenas viera ante sí que el
campo era una pradera rasa,
habrían desaparecido las crines y la cabeza del caballo.

(Franz Kafka, "El deseo de ser piel roja", en Contemplación, 1913)

miércoles, 19 de mayo de 2010

La fuite du temps..

Otra película romántica pero de final amargo. Hace días que la estoy recordando, menos mal que mis pocos megas aún guardan cosas valiosas. Yo sigo con mi alma petrarquista. Lo que pasa es que si uno habla de Petrarca al final tiene que hablar de Ronsard.
Entonces hoy diré que tengo el alma ronsariana, que queda un poco ortopédico, pero debido a una casualidad de esas bonitas, hoy me debo a Ronsard. El otro día compré en un mercadillo de flores un ramito de "siemprevivas" y casualmente, revisando algunos poemas de Ronsard he dado con esta maravilla. Espero que os guste y que no os contagie, bueno sí, un poco, un estado que en mi es crónico.
Siempreviva
Para que así de siglo en siglo sobreviva
la perfecta amistad que Ronsard te profesa,
la razón ofuscada por tu pura belleza
y en tus brazos gemelos la libertad cautiva;
para que sepa el mundo que estaba siempre viva
tu imagen en mi sangre y en mi memoria impresa
que mi alma rendida sólo de ti está presa,
hoy te envío mi amor con esta Siempreviva.
Ella perdurará largo tiempo fragante .
Te haré, después de muerta, vivir perpetuamente,
tanto puede el empeño de un servidor amante
que al honrarte pretende honrar la virtud suma.
Tu nombre, como Laura, vivirá eternamente,
al menos los que vivan los libros y la pluma.

martes, 18 de mayo de 2010

Un goût d'éternité..

Inolvidable el film de Claude Lelouch, e inolvidables los temas que acompañan la película como À l'ombre de nous o L'amour est bien plus fort que nous. Toda la película se desenvuelve con un aire muy naïf, amable y chic. Mira que les gusta el romance a los franceses...y yo no sé resistirme. Y para no rizar más el rizo con detalles empalagosos dejo un poema de un autor con menos regusto a algodón de azúcar, aunque no por ello exento de intensidad.
Eres el horror de la noche, te amo como se agoniza, eres débil como la muerte. Te amo como se delira, sabes que mi cabeza muere, eres la inmensidad, el miedo. Eres bella como matar es bello, con el corazón desmesurado me ahogo, tu vientre está desnudo como la noche.
(Eres el horror, George Bataille)

lunes, 17 de mayo de 2010

Ideal para un lunes..

Hoy es uno de esos lunes con poca gracia. Se me ha ocurrido consultar mi saldo de la cuenta corriente, y me ha invadido una sensación extraña. Inmediatamente me ha hecho pensar en esa sensación tan personal que describía la señorita Holly Golightly en la maravillosa historia de Desayuno en Tiffany's. Al igual que ella, yo tampoco consigo ahorrar. Menos mal que el susto ya se me ha pasado. Lo bueno es que me ha traído a la mente este fragmento inolvidable.
Pero no es eso lo que me vuelve loca de Tiffany's. Oye, ¿sabes esos días en los que te viene la malea?
¿Algo así como cuando sientes nostalgia?
No-dijo lamentablemente-No, la nostalgia te viene porque has engordado o porque llueve muchos días seguidos. Te quedas triste, pero nada más. Pero la malea es horrible. Te entra miedo y te pones a sudar horrores, pero no sabes de qué tienes miedo.
Sólo que va a pasar alguna cosa mala, pero no sabes cuál. ¿Has tenido esa sensación?
Muy a menudo. Hay quienes lo llaman angst.
De acuerdo. Angst. Pero ¿cómo le pones remedio?
No sé, a veces ayuda una copa. Ya lo he probado. También he probado con aspirinas. Rusty opina que tendría que fumar marihuana, y lo hice, una temporada, pero sólo me entra la risa tonta. He comprobado que lo que mejor me sienta es tomar un taxi e ir a Tiffany's. Me calma de golpe, ese silencio, esa atmósfera tan arrogante; en un sitio así no podría ocurrirte nada malo, sería imposible, en medio de todos esos hombres con los trajes tan elegantes, y ese encantador aroma a plata y billetero de cocodrilo. Si encontrase un lugar de la vida real en donde me sintiera como me siento en Tiffany's, me compraría unos cuantos muebles y le pondría un nombre al gato.
(Desayuno en Tiffany's, Truman Capote)

viernes, 14 de mayo de 2010

Blue Bayou..

Lo sabes, me gusta ese juego de carnaval. Cruzar galanterías -con afilados susurros- entre los fustes de la columnata, blancos y duros como muslos de novicia. Empero, temo el enlace y temo el desenlace. Así, me escondo entre la bruma antes que salga el sol y revele mi miseria, como un niño escapa del castigo imaginado. No sé cuándo podré volver.

Huyo por el río, acosado por mis temores, que me siguen como arpías. Sombra psicótica, discutiendo con ellas como si quisieran oírme. Inconsciente, imprudente, me sumerjo en el infierno de mis presunciones.

Despierto empapado en sudor, con el portazo. La camisa pegada al cuerpo. Otra vez de noche, las luces entran por la ventana del hotel como marinos de permiso: he llegado a Nueva Orleans. Aún queda en el aire su perturbadora esencia. Perfume que acelera el pulso, amor ardiente. Sin apenas respiración, caigo sobre las sábanas. Desespero cuanto la deseo. No consigo acordarme de ella y sé que he vuelto a perder mi redención.

Su aroma se transforma y me tortura. Ahora huele a sangre y a pólvora. Hubo un perro muerto cerca de mi casa, hace ya… Recuerdo su mirada cínica, la infinita sonrisa sardónica… sus comentarios zumbaban en mis oídos todo el camino, hasta la puerta de la iglesia. Al final del verano quedó tieso, de puro vacío. Parecía la estantigua del extravío. Hoy veo sus ojos y rompe a correr la memoria, agitando los brazos descoordinada.

-Tú serás yo- Me decía, con la voz vibrante de mil alas vidriosas.
-Tú serás yo- Me recuerda, mientras lo observo aterrado en el espejo.
-Tú serás yo. “

Manimor.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Exiliada en el sueño..

Me gusta Baudelaire por muchos motivos, pero su juego de correspondencias con el mar me emociona tremendamente. Poesía y océanos, dos enormes fuerzas que el poeta fusiona para removernos por dentro. Hay épocas que necesitan a Baudelaire.
Un rumoroso puerto donde mi alma bebiera. A torrentes el ruido, el perfume, el color; Donde naos surcando el oro y el moaré, Abren inmensos brazos para estrechar la gloria. De un puro cielo, donde vibre eterno calor. Y hundiré mi cabeza sedienta de embriaguez.
En ese negro océano, donde se encierra el otro, y mi sutil espíritu que el vaivén acaricia. Os hallará otra vez, ¡oh pereza fecunda!¡Infinitos arrullos del ocio embalsamado!
(Versos de La cabellera, Baudelaire)

martes, 11 de mayo de 2010

Cuando todo languidece..

Cuando todo languidece alrededor, y nuestro corazón, cansado como un viejo diablo, nos avisa con su débil latido lo caro que hemos pagado aquellas fantasías, ahora convertidas en bóvedas oscuras. Quizás más adelante, el guiño de un desconocido podrá devolver a tu alma su intrepidez marinera, y el pasado será solo una esfinge desgastada. Mientras, te esperaré junto a las rocas para recoger tu dolor, como los restos de un naufragio inútil, para que la tristeza no sea morada de tinieblas.

lunes, 10 de mayo de 2010

Metafísica de las góndolas...

Todo se hunde a mi alrededor. Después de pasar la mañana llorando, besando tu retrato, diciendo a tu fantasma locuras que me dejan temblando, tomo mi sombrero, voy y vengo, me digo que hay que acabar con esto de la manera que sea.

.........

Y cuando todo esto me ha zumbado bien en los oídos, cuando la naúsea se apodera de mí, me encierro en la soledad y la encuentro tan negra y tan profunda que ya no me atrevo a ir ni a un lado ni a otro.
........
Todas las fibras de mi cuerpo querrían separarse de él para ir hasta ella y atraparla; todas las nobles simpatías, todas las armonías del mundo nos empujaron el uno contra el otro, y entre nosotros hay un abismo eterno.
(Los amantes de Venecia, George Sans)

viernes, 7 de mayo de 2010

Todo es color aurora..

A esta mujer no le han dicho que a las hamburguesas las carga el diablo. Parece tan pensativa..Los personajes de las fotografías de Erwin Olaf parecen parte del mobiliario. Me pregunto yo ¿qué interés tendrá este artista en ello? Aunque ese ambiente retro lo encuentro francamente cautivador. Y yo, con mi alma petrarquista, estado de animo que no me abandona, ya me perdonareis, pensando en Paul Eluard, quizá nuestra amiga también piense en su poesía, de ahí el ensimismamiento.
Bueno amigos, para inagurar el finde os dejo otro poema, bueno solo un trozo, que es mejor así, breve e intenso. Tanta poesía quizá corramos el riesgo de morir de romanticismo y tampoco es cuestión, que yo me dejo llevar por este ánimo y no tengo límites.
La Muerte, El Amor, La Vida
Creí que me rompería lo inmenso lo profundo
Con mi pena desnuda sin contacto sin eco
Me tendí en mi prisión de puertas vírgenes
Como un muerto sensato que había sabido morir
Un muerto coronado sólo de su nada
Me tendí sobre las olas absurdas del verano
Absorbido por amor a la ceniza
La soledad me pareció más viva que la sangre
Quería desunir la vida
Quería compartir la muerte con la muerte
Entregar mi corazón vacío a la vida
Borrarlo todo que no hubiera ni vidrio ni vaho
Nada delante nada detrás nada entero
Había eliminado el hielo de las manos juntas
Había eliminado la osamenta invernal
Del voto de vivir que se anula.
Tú viniste y se reanimó el fuego
Cedió la sombra el frío aquí abajo se llenó de estrellas
Y se cubrió la tierra
De tu carne clara y me sentí ligero
Viniste la soledad fue vencida
Tuve una guía sobre la tierra y supe
Dirigirme me sabía sin medida
Adelantaba ganaba tierra y espacio
(Paul Éluard)

jueves, 6 de mayo de 2010

Con suspiros trato de llamarte..

Por si no teníais empacho de romanticismo os dejo con el gran Petrarca, poeta e inspirador de poetas. Qué lo disfrutéis!
No tengo paz ni puedo hacer la guerra...
No tengo paz ni puedo hacer la guerra,
temo y espero, y del ardor al hielo paso,
y vuelo para el cielo, bajo a la tierra,
nada aprieto, y a todo el mundo abrazo.
Prisión que no se cierra ni des-cierra,
No me detiene ni suelta el duro lazo;
entre libre y sumisa el alma errante,
no es vivo ni muerto el cuerpo lacio.
Veo sin ojos, grito en vano;
sueño morir y ayuda imploro;
a mí me odio y a otros después amo.
Me alimenta el dolor y llorando reí;
La muerte y la vida al fin deploro:
En este estado estoy, mujer, por tí.
(Petrarca)

miércoles, 5 de mayo de 2010

Del Romanticismo y otras cosas..

Este verano tuve la suerte de visitar el cementerio de Génova y debo confesar que es de las cosas más bellas y turbadoras que he visto en mi vida. El guarda me regaló el catalógo, aunque nada como verlo al natural, autentica belleza en piedra. El cementerio de Londres de Hightgate impresiona igualmente, porque además se funde con la belleza del paisaje, de manera que las tumbas empiezan a levantarse por la fuerza de las raíces, confiriendo al cementerio un ambiente maravillosamente romántico, escenario fantástico para la gente soñadora como yo. Un espectáculo difícil de superar, un atrezzo para el ensueño.
Hoy me siento con el alma petrarquista..seguiré con cosas románticas.

Quiero decir que hay gente que es orgullosa incluso aquí. Fíjese, esta señorita Gautier parece que ha sido una mujer de vida alegre, y perdone la expresión. Ahora la pobre está muerta, y de ella queda lo mismo que de las otras de las que nadie tiene nada que decir y que regamos todos los días; bueno, pues, cuando los familiares de las personas que están enterradas a su lado se enteraron de quién era, ¿quiere usted creer que todo lo que se les ocurrió decir fue que se opondrían a que la enterraran aquí, y que tendría que haber sitios aparte para esta clase de mujeres lo mismo que para los pobres? ¿Cuándo se ha visto esto? Me los tengo yo bien vistos a ésos: ricos rentistas que no vienen más que cuatro veces al año a visitar a sus difuntos, que les traen flores ellos mismos, ¡y mire qué flores!, que andan mirando lo que supone la conservación de quienes dicen llorar, que escriben en sus tumbas lágrimas que nunca han derramado, y que vienen a poner peros por el vecindario. Mire, yo no conocía a esta señorita ni sé lo que ha hecho; bueno, pues, no sé si me creerá usted, pero la quiero a esta pobrecilla, y tengo cuidado de ella y le pongo las camelias al precio justo. Es mi muerta preferida. Mire usted, nosotros nos vemos obligados a amar a los muertos, pues tenemos tanto trabajo, que casi no tenemos tiempo de amar otra cosa.
(La Dama de las Camelias, Alexandre Dumas fils)

martes, 4 de mayo de 2010

Heroínas románticas..

Manon Lescaut es realmente una historia conmovedora que me conozco al detalle, y sin embargo, cuando cae en mis manos ese volumen, mi simpatía por él me sigue atrayendo, lo abro y por centésima vez revivo con la heroína del abate Prévost. Y es que es una heroína tan real, que me parece haberla conocido. En aquellas nuevas circunstancias la especie de comparación que se daba entre ella y Marguerite hacía que la lectura tuviera para mí un aliciente inesperado, y a mi indulgencia se añadía lá piedad, casi el amor por la pobre chica a cuya herencia debía yo el volumen. Manon había muerto en un desierto, es verdad, pero también en los brazos del hombre que la amaba con todas las energías de su alma y que, una vez muerta, le cavó una fosa, la regó con sus lágrimas y en ella sepultó su corazón; mientras que Marguerite, pecadora como Manon y quizá convertida como ella, había muerto en el seno de un lujo suntuoso, a juzgar por lo que yo había visto, en el lecho de su pasado, pero también en medio de ese desierto del corazón, mucho más árido, mucho más vasto, mucho más despiadado que aquel en el que había sido enterrada Manon.

(La Dama de las Camelias, A. Dumas fils)

lunes, 3 de mayo de 2010

Quién no ha soñado con...

Compró un plano de París, y con la punta del dedo hacía correrías por la capital, en el mapa. Subía por los bulevares, deteniéndose en todos los ángulos, en las líneas que simulan las calles y en los cuadritos que señalan los edificios. Cansada a la postre de mirar, cerraba los ojos veía, en las tinieblas, retorcerse a impulsos del viento las luces de gas desplegarse con estruendo ante las puerta de los teatros los estribos de los coches.
Se suscribió a La Canastilla, revista de señoras, y a La Sílfide de los Salones, devorando, sin que se le fuera nada, el relato de todos los estrenos, carreras y reuniones, e interesándose por el debut de una cantante o la apertura de una tienda. Conocía las modas, las direcciones de los buenos modistos, los días de bosque o de ópera. Estudió en las obras de Eugène Sué las descripciones de los mobiliarios y leyó a Balzac y a George Sand, buscando en ellos calmantes imaginarios para su avideces personales. Incluso comiendo hojeaba libros, mientras Carlos hablaba y comía. El recuerdo del vizconde reaparecíasele de continuo en sus lecturas, estableciendo entre él y los personajes novelescos lazos de unión. Pero el círculo en cuyo centro aparecía fue poco a poco ensanchándose en torno de él, y la aureola que le circundaba apartóse de su figura y se instaló más lejos para iluminar otro en sueños.
París más vago que el océano, brillaba ante su visita, entre encendidos fulgores. La populosa vida que en aquel tumulto se agitaba hallábase, no obstante, dividida y prefectamente clasificada.
(Madame Bovary, G. Flaubert)

La Fée aux Miettes

Mi foto
Zaragoza, España
Adoro a Colette, L.Durrell, Baudelaire, R.Queneau, Boris Vian, Joyce Mansour. Los escritores y diseñadores japoneses. El cine de J.L.Godard y de Wong Kar Wai. Le Quartier Le Marais à Paris. Anna Karina. Las fotos de Mª Angeles Cuartero. Angel Schelesser y más...