jueves, 11 de agosto de 2011

Nostalgia y glamour..

Además, tenía un gato y tocaba la guitarra. Los días de mucho sol se lavaba el pelo y, junto con el gato, un rojizo macho atigrado, se sentaba en la escalera de incendios y rasgaba la guitarra mientras se le secaba el pelo. Cada vez que oía la música, yo me acercaba silenciosamente a la ventana. Tocaba muy bien, y a veces también cantaba. Cantaba con el acento afónico y quebrado de un muchacho. Se sabía todas las canciones de los musicales de éxito, de Cole Porter y Kurt Weill; le gustaban sobre todo las canciones de Oklahoma, recién estrenadas aquel verano. Pero en algunos momentos tocaba melodías que hacían que me preguntase de dónde podía haberlas sacado, de dónde podía haber salido aquella chica. Canciones nómadas, agridulces, con letras que sabían a pinar o pradera. Una de ellas decía: No quiero dormir, no quiero morir, sólo quiero seguir viajando por los padros del cielo; y parecía que ésta fuese la que más le complacía, pues a menudo seguía cantándola mucho después de que se le hubiera secado el pelo, cuando el sol ya se había puesto y se veían ventanas iluminadas en el anochecer.
(Desayuno en Tiffany's, Truman Capote)

6 comentarios:

  1. ¡Ay, cómo no enamorarse de una chica así!, acompañada de un gato y una guitarra y sentada de cara a la calle. Gracias por rescatar tan bello pasaje de un libro y una película igualmente preciosa.

    un abrazo desde la tundra

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  2. Que buenos recuerdos de esta novela y de la película. Yo tenía una vecina que cantaba asomada a la ventana, creo que escribí algo sobre ella.

    Ya veo que has estado de vacaciones por Grecia. Un placer entrar en tu blog, como siempre.

    Un saludo

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  3. Darling , que tengo una foto por ahí de Audrey que seguro que te mola ..... estas este finde en SecarralMaño ? ,mua ;)

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  4. Aka, pues sí..una descripción deliciosa, Audrey siempre encantadora.
    Yo te mando un abrazo desde el calor intenso de España.

    Javier, qué bueno tenerte poa quí, me alegra mucho.Gracias por venir a saludar en este agosto mortecino.

    Refu, pues me alegra que vengas a casa, no por navidad pero si por el puente de agosto, tremendo y mortecino..

    besos

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  5. Curioso como la novela se tradujo en la película. No hay duda de que Henry Mancini ha acabado siendo un clásico como Cole Porter y Kurt Weil. Pero lo mejor de todo es que Moonriver es una canción que parece cantar Tom Sawyer diciendo las ganas que tiene de salir a ver mundo. Esa fue la interpretación de una canción "nómada" tal y como dice Capote en su novela. Sin duda una genialidad.

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  6. Bonito comentario Ernest. Mancini es grande, y su tema una auténtica belleza...A mi me sumerge en un estado, como lo he definido en el título del post, entre la nostalgia y el glamour de los años 50.

    Besos bello

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La Fée aux Miettes

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Zaragoza, España
Adoro a Colette, L.Durrell, Baudelaire, R.Queneau, Boris Vian, Joyce Mansour. Los escritores y diseñadores japoneses. El cine de J.L.Godard y de Wong Kar Wai. Le Quartier Le Marais à Paris. Anna Karina. Las fotos de Mª Angeles Cuartero. Angel Schelesser y más...