Todo se hunde a mi alrededor. Después de pasar la mañana llorando, besando tu retrato, diciendo a tu fantasma locuras que me dejan temblando, tomo mi sombrero, voy y vengo, me digo que hay que acabar con esto de la manera que sea.
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Y cuando todo esto me ha zumbado bien en los oídos, cuando la naúsea se apodera de mí, me encierro en la soledad y la encuentro tan negra y tan profunda que ya no me atrevo a ir ni a un lado ni a otro.
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Todas las fibras de mi cuerpo querrían separarse de él para ir hasta ella y atraparla; todas las nobles simpatías, todas las armonías del mundo nos empujaron el uno contra el otro, y entre nosotros hay un abismo eterno.
(Los amantes de Venecia, George Sans)
Sagradas aguas que nos consumen.
ResponderEliminarBesos
¡Cuánta sensibilidad y hermosura! Te visitaré siempre que pueda;-)
ResponderEliminarMuchas gracias, he visto tu blog y me ha cautivado, si hay algo romántico son los piratas, me encantan!!Yo también te visitaré..
ResponderEliminarJoaquín, qué brevedad, me has acostumbrado mal!
Es negro... pero llega en el momento preciso , gracias amore ;)
ResponderEliminarCourage mon ami!
ResponderEliminarMe encanta cómo seleccionas. Por ejemplo, esta y la anterior. Siente uno el miedo y el resentimiento a la vida del amante desdichado. Después, esa intensa pasión que llena de esperanza. Es triste, pero hermoso y necesario ¿Es la vida?
ResponderEliminarJo Soliloco, haces unos comentarios tan buenos, analizas todo como tu eres, con esa viveza que te caracteriza. Eres una gran pensador, y encima sensible, me alegra enormemente que disfrutes con el blog. Es un gran halago y me hace muy feliz.
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