Las teatrales fotos de Thomas Klementsson, el maravilloso fotógrafo de moda, me hacen pensar en el espectáculo Drag de anoche. Sí, chicos, ayer tocó salir por el ambiente. No está nada mal para echar unos bailes, ya se sabe: música comercial como Papelina Rubio, Tripi Martin, Britney Speed, estilos de lo más variopinto,(causó furor el del Pequeño Poney) un público, en el fondo, muy variado...etc.
Pero en mi continua reinvención de la ciudad debo decir que puede romper el hastío veraniego. Estaba, nunca mejor dicho, muy ambientado dadas las fechas en las que estamos, aunque conviene tener en mente la premisa de ir sabiendo lo que esperar. En mi caso, salí con las bambas dispuesta a bailar lo que me echasen.
Lo que no entiendo es ¿por qué son tan caros los bares de ambiente? En estos tiempos de crisis deberían inventar algunas formulas económicas como hacen en otros países.
pues te contesto lo que me dijo a mi un portero de una discoteca hace años,cuando protestamos por lo caro de la entrada : " es que esto es un bar gay"
ResponderEliminarsimple y llano. que te parece paya mala?
mua
Lo flipo tronco...
ResponderEliminarA ver si la igualdad llega también en forma de precio a los bares de ambiente...
beso