Bueno, bueno, el fin de semana ha cundido lo suyo...que os voy a contar. En esa continua reinvención de la ciudad esto se ha convertido en un no parar. Ayer no pude poneros al corriente porque tenía una resaca infernal, (salí muy animada) aunque por suerte se me pasó pronto, e incluso fuimos a echar la tarde a la piscina. Muy aprovechado... sí..sí..
Y yo que me repito cada finde como un mantra que no voy a beber....no tengo fuerza de voluntad ¿o qué?
De nuevo lunes, y qué raro se me hace....aunque viene bien un día anodido despues de tanta fiesta. Será el verano que no me deja ver pasar los días sin participar intensamente. Atentos ahora a este fragmento porque es de un libro mágico.
No hay otra resurrección de la carne que el verano.Todas las teologías están hechas a imagen y semejanzas del calendario. No tenemos otra referencia. El clima y sus variaciones son la única biografía universal posible. Va uno pasando de los libros a la meteorología, con los años. Me exilio de la cultura en el buen tiempo. Claro que sueño con volver, como todos los exiliados. Pero es bueno retardar el regreso. Escribo este libro en verano y le dan todas las luces del día, pero habrá que exponerle también a otros témperos, porque un libro no debe ser un cuajarón de tiempo, una concentración de vida.
(Mortal y Rosa, Francisco Umbral)
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