Ya sabéis amigos, a celebrar con riquísimos crêpes, fiel a la tradición francesa, y con buena lectura, eso lo añado yo, creando otras tradiciones, que siempre está muy bien.
Y haced caso de los refranes típicos de este día: À la Chandeleur, l'hiver se meurt ou prend vigueur!
Por cierto, ¿qué leerá la chica del cuadro? Acompañando la delicada pintura de Fragonard unas líneas de una obra del mismo siglo.
Pocas personas hay que conozcan la fuerza de estos movimientos del corazón. La mayor parte de los hombres son sensibles solamente a cinco o seis pasiones, alrededor de las cuales discurre su vida y a ellas se reducen sus agitaciones. Quitadles el amor y el odio, la esperanza y el temor y ya no sienten nada. Pero las personas de un carácter más noble pueden sentirse agitadas de mil maneras: no se diría sino que tienen más de cinco sentidos y que pueden percibir las ideas y las sensaciones que traspasan los linderos ordinarios de la naturaleza. Y como que tienen conciencia de esta superioridad que les eleva por encima del vulgo, se sienten orgullosas de ella.
Sin embargo, esta mudanza era sólo externa. Debo confesarlo para vergüenza mía; en San Lázaro desempeñé el papel de un hipócrita. Cuando me quedaba solo, en lugar de estudiar, me ocupaba únicamente en lamentar mi destino. Maldecía mi prisión y la tiranía que en ella me encerraba. Apenas me repuse un tanto del abatimiento en que me sumió mi turbación, caí de nuevos en los tormentos del amor. La ausencia de Manon;la incertidumbre de su suerte; el temor de no volver a verla nunca más, eran el objeto único de mis tristes meditaciones.
(Manon Lescaut, Abbé Prevost)
cómo me gustan tus entradas; el texto y la imagen que eliges; acabas de obligarme a preparar unas crêpes! a tu salud!
ResponderEliminarGracias amigo, me alegra el día leer tu mensaje. Es un revulsivo enorme para mí. Espero que te hayan quedado bien los crêpes, hace una de días que no como unos!!Que los disfrutes!!
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