Muñeca-alacena de lo cotidiano. Hay kilómetros de líneas en un ocaso. Bordearé el camino de las palabras para llegar a mis juguetes, y en un descuido, te engañaré para encerrar una noche de junio en nuestros cubos.
Rosas recién cortadas, decapitadas de su tallos...en la primeras tardes de sol. El calor convierte en vapor las lágrimas, y los proverbios se cruzan de brazos y no trabajan, seductores, se sientan con los turistas a ver pasar cristos sindicados.
Me has transmitido recuerdos de una infancia rota y no sé porqué pero con lo de los cristos sindicados me has recordado a Sevilla en semana santa jajaja. Delicadas palabras nos ofreces, gracias por escribir lo que escribes Miette!! Un abrazo bella hada!
ResponderEliminarHermoso tu texto, Miette.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué recuerdos, precioso! :)
ResponderEliminarMe viene la infancia a trompicones y el verano y también un poco del dolor de esos años.
ResponderEliminarEs una maravilla lo que has escrito :)
Hola Miette, las palabras te buscan dentro y nos llenas de su dulzura, la vivencia íntima de tu voz... me gusta que tu voz la hagamos libre en nuestros ojos, en otro canto que también forma parte de tí y más...
ResponderEliminarBesos
Proverbios en huelga de brazos caídos que se sientan junto a los turistas a ver... cristos sindicados? Te superas cada día Miette
ResponderEliminarMuy lindo tu escrito, Un Placer conocer tu blog y seguirte, bendiciones
ResponderEliminarGracias por tus palabras, pasa cuando quieres, desde ahora este también es tu blog..
ResponderEliminar