Y de regaliz os dejo con André Breton que aunque no os guste siempre tuvo sus momentos.
La Linterna Sorda
Y la lluvia, como cae aquí, y su perfume son los grandes órganos : ¡qué estación para la llegada en cualquier sentido sobre mil raíles, para la maniobra sobre otras tantas placas giratorias de sus expresos de cristal! A toda hora cambia sus lanzas blancas y negras, las corazas que vuelan como destellos de melodía en esas armaduras antiguas hechas de estrellas que aún no he conocido.
(Poemas II, André Breton)
La Linterna Sorda
Y la lluvia, como cae aquí, y su perfume son los grandes órganos : ¡qué estación para la llegada en cualquier sentido sobre mil raíles, para la maniobra sobre otras tantas placas giratorias de sus expresos de cristal! A toda hora cambia sus lanzas blancas y negras, las corazas que vuelan como destellos de melodía en esas armaduras antiguas hechas de estrellas que aún no he conocido.
(Poemas II, André Breton)