Ahora llega el tiempo de los navíos de las conquistas.
Se pierde el gesto de sobre cerrado
que pesa en el olvido.
En todas las direcciones gravitan
cuerpos sordos como silbidos.
Manos silenciosas
estanques que resisten al asalto.
Flores renaciendo en días solemnes
consuelo de ojos sin mirada.
Me envolviste de verdes sonidos, silbidos y ojos con mirada. Se nota la primavera.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias bella, un gusto tu visita!
ResponderEliminarbesos mil